Me gustaría poder redactar todo en una sola entrada pero me parece extremadamente larga, por qué? porque ha pasado mes y medio de aventuras estando acá, así que empecemos y veamos como termina esta entrada.
Las despedidas:
Wow, que puedo decir, despedirse nunca ha sido sencillo para nadie... Yo se que eso no fue un adiós, sino un simple hasta pronto, pero ese sabor amargo y ese dolor en el pecho no lo entienden tan facilmente.
Se puede decir que tuve dos despedidas, una con mi familia y otra con mis amigos. Con mi familia fue algo muy sencillo, una pequeña picadera (como decimos en Venezuela) y compartir risas e historias con mis tíos, abuelos, papás y primitos.
Mi despedida con mis amistades, creo que fue lo que más me movió el piso, mis amigas se encargaron de que ese día fuese lleno de sorpresas en todos los sentidos. Mi novio formó una de esas maravillosas sorpresas, porque justo ese día había estado de emergencia en la clínica y a pesar de eso apareció (sin que yo supiera que al final iba) en la fiesta. Ese día estuvo lleno de risas, fotos y si por supuesto lágrimas pero es algo que estando aquí tengo muuuuy presente.
Pero sigamos, mi despedida fue 2 días antes del tan esperado día: 11 de Enero de 2016. Por supuesto esos dos últimos se me pasaron volando (peleando con la maleta unas tres veces antes de cerrarla, eso merece una entrada para ella sola) e intentando compartir esas últimas horas lo más posible con mis seres queridos.
El Gran día:
El gran día empezó a las 3:30 am porque el vuelo salia a las 8:00 am y en Venezuela tenemos que estar casi 4 horas en el aeropuerto.
Salimos mis papás, mi novio y yo vía al aeropuerto a las 4:00 am llegando en 15 minutos. Yo sabía que el comienzo de ese día iba a ser sumamente duro, pero no me imaginé que lo fuera tanto...
Yo tuve la BENDICIÓN de no viajar sola, una de las chicas que comenté en una de mis primeras entradas viajaba conmigo ese día, así que nos encontramos en el aeropuerto he hicimos todo el papeleo y hasta la espera juntas.
A las 7:00 am, fue que la palabra DESPEDIDA se hizo gigante y latente.
Yo soy una persona sumamente sentimental y ese día apenas dije el primer: "nos vemos pronto" las lágrimas empezaron a correr por mi rostro. Despedirme de mis papás fue difícil, no es nada sencillo verlos a ellos también con lágrimas, a la hora de despedirme de ÉL creo que me terminé de desmoronar. Él siempre ha sido una persona que me demuestra fortaleza ante cualquier circunstancia y por primera vez en la vida lo veía de la misma manera que yo estaba: con una tristeza indescriptible pero igual sus palabras siempre fueron de apoyo.
Por eso hoy quiero agradecerles, todo el apoyo que me dieron y que me han dado, por creer en mí y por siempre brindarme ánimos. El lema siempre fue: Creer es la base del logró... Así que USA prepárate porque aquí voy
GRACIAS POR TANTO!
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